Tal parece que el concepto de esquizofrenia, elaborado en 1911 por Bleuler como una “escisión de las funciones psíquicas”, no estaba lejos de la realidad. En la actualidad algunas teorías proponen que la base de la enfermedad radica en un defecto de la integridad funcional de los circuitos neurales, más que en las alteraciones específicas de ciertas zonas cerebrales o de algunos sistemas de neurotransmisión química.

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Se ha estimado que de 2 al 6% de niños y adolescentes en la comunidad padecen de depresión, y que en la actualidad la tercera causa de muerte entre los 10 y los 19 años de edad es el suicidio. La falta de eficacia y el perfil de los efectos adversos de los antidepresivos tricíclicos dieron paso a los inhibidores selectivos de recaptura de serotonina (ISRS) como la única clase de antidepresivos para su tratamiento.

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El doctor Wong y sus colaboradores de la Universidad de Londres, hicieron un estudio sobre la prescripción de psicotrópicos en la población menor de 18 años en nueve países, entre 2000 y 2002: cuatro europeos, tres latinoamericanos, Estados Unidos de Norteamérica y el Canadá, considerados como países de alta prescripción de psicofármacos.

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Aunque los efectos de los antidepresivos (AD) en las hormonas glucocorticoides (GC) y sus receptores son relevantes para la acción terapéutica de estos fármacos, los mecanismos moleculares que subyacen a estos efectos no son claros. Los estudios en pacientes deprimidos, animales y modelos celulares han demostrado que los AD aumentan la expresión y la función de los receptores de glucocorticoides (GR) y mineralocorticoides (MR). Esto se asocia con un aumento de la retroalimentación negativa por los GC endógenos.

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La lamotrigina se estudió inicialmente como un antiepiléptico (AE) y entró al mercado estadounidense en 1994 como tratamiento coadyuvante para crisis parciales en adultos con epilepsia. En junio de 2003 fue aprobada por la Food and Drug Administration (FDA) para el tratamiento de mantenimiento en el trastorno bipolar tipo I, y fue el primer AE y el segundo fármaco desde el litio con esta indicación (la olanzapina fue aprobada más recientemente).

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